viernes, 5 de agosto de 2016

COLUMNA

Cosmos

Héctor Contreras Organista






 CHILPANCINGO, CAPITAL DEL ABSURDO
¡CAPITAL DE MEMBRETE!
 Chilpancingo, la aparente ciudad capital de Guerrero es considerada por propios y extraños, desde hace mucho tiempo, como “La Capital de estado más fea, triste y abandonada del país” y sigue aferrada a sostener “con mucho orgullo” ese título.
 Para colmo de los colmos somos sus propios habitantes quienes nos encargamos de reforzar tal propósito, porque a la hora de elegir un nuevo presidente municipal mediante sufragios, votamos por lo que consideramos “menos pior” y ahí están los resultados.
¡No tiene la culpa el indio sino quien lo hace compadre… o presidente municipal!
 ¿Para qué culpar a tal o cual alcalde de esto y de lo otro y de lo demás si los presidentes municipales no tienen la culpa de nada… 

 No se hacen solos… 
 Nosotros… Sí, nosotros… no-so-tros, con nuestro voto en las urnas hemos sido quienes los encaramamos en la silla principal del municipio y los hacemos no solamente alcaldes sino dioses soberbios, reyes intocables, neuróticos inmaculados, poderosos y prepotentes, aunque carezcan de el mínimo sentido común para gobernar... 
 ¡¡¡Y… hasta les regalamos “casa”, como al perro de la azotea… y nadie los puede ir a “regañar” a “su casa” y menos a “gritarles”… ni siquiera quienes ingenuamente lo hicieron presidente municipal!!! 
 Ahí está, de carne y hueso y un pedazo de pescuezo su “todos semos Chilpancingo”... ¿Todos? ¿De dónde? ¿Cómo?
 Siendo un poderoso presidente municipal, un político con patente de corso y dueño de libertades y oportunidades para bien gobernar, desvían los propósitos por los cuales buscaron entre la gente votante convencerla de ser “los mejores”.
 Montados ya en la burra, cambian. 
 Ejemplos… 
 ¡Sobran! 
 ¿Resultados? 
 Los de siempre:
Chilpancingo sigue siendo la capital de estado más fea no sólo del país, sino del mundo.
 ¿Y qué hacen los señores presidentes municipales para remediar tan triste, deplorable y gris calificativo? ¡¡¡NADA!!!
  ¿Y la ciudadanía? 
 Critica a los alcaldes, pero ya se sabe:
 1.-Desde siempre el jefe de la tribu que después se convirtió en rey, para poder mantenerse intocable en el trono debe traer a raya a los súbditos y por eso se rodea de ejércitos que aplaquen con brutalidad a quien proteste
 2.-Se rodea de los brujos, que después fueron magos y alquimistas y más tarde sacerdotes y sacerditos, para que apacigüen “espiritualmente” a los revoltosos
 3.-Finalmente el rey, jerarca, jefe o alcalde se rodeó de la “prensa” lava-cocos, tergiversadora, malévola, cruel, mentirosa, falsa, farsante, para repetir miles de veces una mentira hasta “convertirla” en verdad, a favor del rey… o presidente municipal. Prensa manipuladora.
 Y por todo ello quien protesta, quien pretende cambiar el caos o quien señala algo, no prospera, no hace mella y ni siquiera un rasguño produce en su intento. La crítica a un alcalde, en esos términos, le hace lo que el viento a Juárez.
 “Levantemos Chilpancingo”, un colectivo integrado por personas destacadas, valiosas y queridas en la capital guerrerense, intentó –así lo informó el propio colectivo en conferencia de prensa-, intentó días antes de dar la información a los periodistas, dialogar con el presidente municipal de Chilpancingo para conversar de los problemas que dieron a conocer a los medios y que se buscaran y obtuvieran soluciones.
 Señalan, en un escrito, que el señor alcalde nunca tuvo tiempo de atenderlos y recibirlos dadas sus múltiples ocupaciones y por ello, después, convocaron a una rueda de prensa para hacer oír su voz y dar a conocer públicamente sus inquietudes a favor de Chilpancingo.
 Por otra parte, un dirigente de sindicato independiente de trabajadores se puso en huelga de hambre en la plaza central, buscando, igual que el colectivo, igual que mucha gente, ser escuchado por el alcalde. Jamás se le atendió por parte del presidente municipal, el “dueño de la casa”, la casa sin amo. Por sentido humanitario fue rescatado y llevado a un hospital para evitar su muerte a consecuencia de la abstinencia de alimentos.
 En el primer caso, sin que el ayuntamiento o sus voceros oficiales hagan suyos los problemas y salgan a dar la cara y ofrezcan a la ciudadanía respuestas oficiales, que es su obligación, guardan silencio, hacen mutis, y con eso suponen que los problemas quedan superados, al menos para ellos que son la parte oficial.
 Es decir, practican la política del avestruz: Entierra la cabeza y enseñan las nalgas.
 En el segundo caso, en cínica burla, los “periodistas” aplaudidores y aduladores del alcalde señalaron con todas sus letras que la persona que se puso en huelga de hambre y que fue rescatada, “no aguantó” y rieron y se burlaron. Sus mofas fueron publicadas.
 Nadie duda que quienes así “defienden” al presidente municipal en funciones, de ese modo obtienen el pan nuestro de cada día en un maridaje de tal degradación reprobable. Aíslan, encapsulan al alcalde y lo “protegen” de los gobernados. Ahondan la zanja entre pueblo y autoridades. 
 Por eso, al parecer, la ciudadanía chilpancingueña ha llegado al límite de la tolerancia. 
Trienios van, trienios vienen, nacen nuevos ricos, nacen nuevos síndicos, regidores, funcionarios, diputados, senadores pero desafortunadamente no para servir a la ciudadanía sino para servirse, y a su lado, van ejércitos de parásitos vividores a cual más intocables, pero también indeseables.
Urge el autoanálisis, es indispensable la crítica, que asomen las verdades y que ya no se permitan más abusos.
Aumentos deshumanizados a las tarifas de las gasolinas y del gas, de la energía eléctrica y con ellos vienen aumentos de precio a todo y la prensa vendida bandida y comprada aplaudiendo a los gobernantes.
Aumenta todo, menos los salarios. Los modelos educativos de otros países nos están indicando por las redes y abriendo los ojos en el sentido de que el sistema educativo en México, no sirve. Pero, a garrote vil el gobierno trata de imponerlo para dar paso a los colegios privados.
Vemos y aplaudimos que paisanos como don Ignacio “Nacho” Vázquez Memije y por otro lado don Francisco Osorio Flores, gente querida, respetable y respetada en Chilpancingo hacen esfuerzos titánicos por buscar mejoras para Chilpancingo. 
Y es que nuestra capital, la más fea del mundo, ya no puede ni debe hundirse más…
Chilpancingo, fue la capital de Guerrero hasta 1987, de ahí en adelante, todo asunto oficial que a Guerrero corresponda, se trata en el puerto de Acapulco. Chilpancingo es una capital de estado de membrete… y nadie protesta, nadie dice nada… porque aquí se hace lo que su majestad, el rey, diga. Punto.
 (Las gráficas muestran que en la remodelación de la plaza central no se tomó en cuenta la necesidad de colocación de bancas o que por lo menos las jardineras pudieran servir para ese propósito. Queriendo, aún se puede ofrecer mayor comodidad a las familias).

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