lunes, 3 de octubre de 2016

ARTÍCULO

Asunto:

Diferendo: CFE y Capama

Juan López
Acapulco observó impasible a la Comisión Federal de Electricidad someter a la Comisión de Agua Potable Municipal, cortándole parte del suministro de energía eléctrica, dejando a una población civil sin abasto de agua potable para sus usos e higiene en un atentado que no debemos permitir. 
Sin embargo es al Congreso Federal al que compete regular las actividades públicas, jurídicas y sociales de la Comisión Federal de Electricidad, pero éste, también ha permanecido indiferente ante tales groserías que CFE lleva a cabo contra los acapulqueños.

Legisladores como René Juárez, Ricardo Taja, Julieta Fernández, Armando Ríos Piter y Flor Añorve, se mecen en la hamaca del presupuesto sin atender los verdaderos conflictos de la sociedad.
Hubo necesidad de la intervención del alcalde Evodio Velásquez Aguirre y del gobernador Héctor Astudillo Flores para que luego de abonarle tres millones de pesos, los mastines de la luz accedieran a reconectar el servicio. El manotazo había sido dado y el amago pasó de la simple escaramuza a dejar sin agua a la mitad de la población. 
Corresponde al Congreso de la Unión ordenar jurídicamente las facultades que hoy por sus pistolas se abroga la CFE. Comunidades enteras no deben quedar por ningún motivo sin los servicios de la energía eléctrica. Igualmente debería hacerse extensiva esta gracia a  hospitales, Cruz Roja, escuelas, asilos, bibliotecas, orfelinatos y a otras instituciones de género benemérito.
Pero mientras sentados en el quicio de nuestra puerta esperamos a que pase el féretro de nuestro enemigo, el Ayuntamiento tiene la facultad constitucional de aplicar contribuciones fiscales comunales a la empresa comercializadora que expende la energía eléctrica. Se debe preguntar al director de Catastro cuándo paga del impuesto predial la CFE por los terrenos urbanos donde tiene instalaciones, oficinas y bodegas. Cuánto paga a Capama por el consumo de agua potable y alcantarillado que ocupa todos los días para sus servicios orgánicos y, lo más importante señor Merced Valdovinos secretario de la recaudación local… ¿Cuánto está pagando CFE por ocupación del suelo?, al utilizar la vía pública, donde tiene instalados miles de postes en todo el municipio, a través de los cuales vende la energía eléctrica a todos los cautivos consumidores acapulqueños. Y hacer extensiva la contribución fiscal a la ocupación aérea del cableado que igualmente se vale de la vía pública para establecer la maraña de cableado dentro de los límites urbanos de la ciudad. 
CFE no es una organización pía que atienda a indigentes, obsequie dádivas y patrocine campañas alfabetizadoras. No. Es un consorcio empresarial lucrativo que factura, cobra IVA y declara a la Hacienda Federal sus pérdidas y ganancias. Tiene insumos como cualquiera y paga en efectivo por compras y servicios.
Por si fuera poco goza de las prerrogativas y ventajas al ser en su género y especie un monopolio irascible, avasallador, premoderno. Corto en amabilidad y tunante con fama de arbitrario.
Por qué no paga pisaje al Ayuntamiento por el uso de las calles acapulqueñas a través de las cuales vende su mercancía?
 Vamos haciendo cuentas: tanto te debe de luz la Capama por el consumo de energía eléctrica y cuánto me debes CFE por ocupar la vía pública que es por ley y naturaleza dominio municipal. 
Es probable que la CFE esté en déficit con el Ayuntamiento.
No existe conflicto jurídico: en Manzanillo hace diez años su alcalde convocó a Telmex a que pagara uso de suelo por casetas telefónicas que instalaba en la vía pública. Telmex se amparó. El caso llegó a la Suprema Corte. Ésta resolvió que el Ayuntamiento era autónomo;  las calles, parte de su soberanía municipal y estableció una nueva jurisprudencia que hoy puede hacer valer nuestro Ayuntamiento.
La vía pública pertenece en derecho al municipio. Es su territorio y su soberanía. Quien la utilice de modo monetario, lucrativo, debe pagar a la Comuna por los beneficios que su negocio le genere. CFE tiene personalidad jurídica propia y está sujeta al Código Mercantil vigente. No es una ínsula que pueda someter a sus caprichos a la autoridad municipal.
PD: “Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”: Jesús.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.