martes, 4 de octubre de 2016

POLICRÓNICA

  Llorona…El actual gabinete estatal que encabeza Héctor Antonio Astudillo Flores, por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), rigurosamente han adoptado la postura de la famosa leyenda mexicana “La Llorona”, ante un eventual recorte presupuestal del 2017, no tiene nada preciso, unos dicen que serán 2 mil y otros tres mil millones de pesos, además sin compromiso de transparencia, ni rendición de cuentas.


Cuando se acerca la hora decisiva para definir el presupuesto de todo México para el 2017, en la que se anuncia una disminución en casi 239 mil 700 millones en el gobierno de la república que hoy en día encabeza el Partido Revolucionario Institucional (PRI), por ende a Guerrero, los manejadores de los dineros creen que les afectará en al menos 2 mil millones de pesos, ahora mismo andan preocupados en el gabinete estatal Astudillista, porque se niegan a renunciar a la opulencia. Pero hay otra versión, que serán tres mil millones de pesos, es decir, están echo camotes, no saben exactamente, nada más sueltan la lengua, pero nada tienen definido. En los últimos días el gobernador de la entidad suriana, Héctor Antonio Astudillo Flores del PRI, junto con sus subalternos de las finanzas estatales han adoptado la postura de la famosa leyenda mexicana “La Llorona” de arriba abajo, sienten que la guillotina les está llegando, para recibir menos dinero para el año 2017. Según la leyenda de “La Llorona” es el lamento lleno de dolor de la mujer indígena en el río donde ahogó a sus tres hijos que procreó con un español, pues el hombre no se quiso casarse, mucho menos reconocerlos. Hay quienes dicen haberla visto vagando buscando desesperada, con un profundo grito de dolor y lamento que clama por sus hijos. La culpa no la deja descansar, su lamento se escucha cerca de la plaza mayor, quienes miran a través de sus ventanas ven una mujer vestida enteramente de blanco, delgada, llamando a sus hijos y que se esfuma en la oscuridad de la noche. Es casi exacta la escena de un gobierno oscuro, sin transparencia, ni rendición de cuentas, con a la cabeza, el gobernador priista Héctor Antonio Astudillo Flores. Andan llorando, que les van a recortar dos mil y tres mil millones de pesos, por ello ahora se ven obligados a ver si los 500 diputados federales, regresan a verlos al igual que los Senadores de la República, para que no le metan tijera al presupuesto de Guerrero. No hay una información precisa, mucho menos uniforme ante esta la eventualidad, el Gobierno del Estado se prepara para presentar ante el Congreso de la Unión los argumentos y la defensa necesaria  para que Guerrero conserve el presupuesto, por lo menos de este año, en el ejercicio fiscal 2017. Como se sabe, ante el anuncio del gobierno federal del recorte para el ejercicio fiscal 2017, el estado de Guerrero requiere por lo menos conservar el presupuesto aprobado para este año que fue de poco más de 49 mil millones de pesos. Existe la propuesta de parte del gobierno federal ante el Congreso de la Unión un recorte histórico por 239 mil 700 millones de pesos al presupuesto para 2017, equivalente al 1.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), y de esta cantidad, por lo menos se presume o calculan los encargados de la Secretaría de Finanzas y Administración del estado de Guerrero, entre ellos Héctor Apreza Patrón, de que podría afectar a la administración Astudillista  por el orden de los 2 mil millones de pesos. Según el protegido y el que le cubre todas sus espaldas de Astudillo Flores, el actual “invisible”, casi fantasma, porque nadie lo puede ver ahora que está  como subsecretario de Administración y Finanzas del Estado, Tulio  Samuel Pérez Calvo, en las últimas horas, se ha hecho el aparecido una y otra vez para hacer declaraciones mediáticas, porque durante todo el año, nadie lo puede ver, y ahora como todo un actor de la obra de “La Llorona”, sale al encuentro con los medios para escupir grabadoras y cacarizas, poniendo cara de horrorizado, pues el gobierno Astudillista sufrirá un descomunal golpe económico y para evitarlo, ahora trae la idea de tratar de conservar en su mayoría los recursos federales para las acciones y obras de beneficio a la población. Sin embargo, señaló que cuando se reducen participaciones y recursos para gasto corriente, ponen al Gobierno del Estado de Guerrero en dificultades para atender las necesidades de los trabajadores. Desde ahora el funcionario  Pérez Calvo, como toda una plañidera, según los intereses de los bolsillos de la pandilla Astudillista, y no las necesidades prioritarias de la mayoría de los guerrerenses, que “si Guerrero no llega a tener por lo menos el mismo presupuesto de este año para el ejercicio 2017, se tendrían afectaciones en la operación de muchos programas, así como el gasto corriente”, según el “fantasma”  subsecretario de Administración y Finanzas del Estado advirtió que por ello se busca que en el Congreso de la Unión, los diputados por Guerrero puedan apoyar para que las reducciones no lleguen al monto que ha sido señalado. Supuestamente, descartó que la reducción del presupuesto pueda provocar el despido de trabajadores. Esto está en veremos, porque la lengua de un administrador de dinero y la de un político,  cuando dicen que no sucederá, ocurre,  aplicándose rigurosamente, con muchas consecuencias, al fin y al cabo tiene el poder, no hay poder humano que se los impida. Si no creen, veamos esta chulada de verborrea que hace Tulio Samuel Pérez Calvo, cuando habla en cuanto a la implementación del plan de austeridad, dijo “que está funcionando desde el inicio de la administración, donde han actuado con políticas de austeridad en todas las ramas y áreas”. Además existe contradicciones en el supuesto y eventual recorte presupuestal, pues el renejuarista,  Daniel Pano Cruz, quien cobra como secretario Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, afirma categóricamente que  existe la proyección de un recorte de 3 mil millones de pesos plasmada en la propuesta de Presupuesto de Egresos federal en varios programas de seguridad pública a nivel nacional de los cuales alrededor de dos mil millones de pesos corresponden al programa de Prevención de la Violencia y del Delito. Como se puede constatar que choca la información que maneja Pérez Calvo y Pano Cruz, lo recomendable, es que se pusieran de acuerdo, pues deja entrever que están más preocupados por el dinero, que ofrecer soluciones para el año entrante.  ¿Hay austeridad?,  pero si los funcionarios siguen despilfarrando dinero a diestra y siniestra, en todo tipo de gastos, entre  ellos carro, chofer, viáticos y porque hasta el día de hoy, no conocemos que el gobernador Astudillo Flores, se haya disminuido su salario al 50 por ciento junto con sus colaboradores y de esa manera ajustarse el cinturón. Lo único que hemos escuchado una y otra vez, es que le hacen al prócer de la televisión ¡¡No hay, no hay dinero!! Lo más que han repetido, una y otra vez un discurso de verborrea de un supuesto plan de austeridad,  en la que presuntamente se ha ejercido la revisión de nómina para verificar que todos y cada uno de los trabajadores estuvieran laborando donde están señalados, y que su salario corresponda a su función. Eso es totalmente falso, porque si realmente el gobierno Astudillista estuviera comprometido con la austeridad, la transparencia, y rendición de cuentas, ya hubiera publicado la lista completa de “aviadores” que habrían encontrado y dado de baja desde el gobierno zeferinista, aguirrista y orteguista, pero nada más fue pura declaracionitis. No hay transparencia, y hasta el día de hoy tampoco se ha informado como en casi 365 días se han ejercido los 49 mil millones de pesos, que es un mundo de dinero, en un estado pobre como Guerrero. Para poder pedir dinero a la federación, primero el gobierno de Guerrero, en su conjunto está obligado a transparentar el manejo del erario, y hasta el día de hoy “El Mago” de Héctor Apreza Patrón, se la ha pasado declarando que siguen encontrando deudas y más deudas, y todo lo reduce de que para concluir el 2017, se necesitan al menos 13 mil millones de pesos. Habría que recordar que al comienzo de la administración Astudillista hablaron “Los Llorones” que habían encontrado de los anteriores gobiernos un quebranto financiero de alrededor de 18 mil 500 millones de pesos, y últimamente se han acumulado otros 13 mil millones de pesos, lo que significa que se han acumulado más de 31 mil 500 millones de pesos. Tampoco han explicado a los guerrerenses como le van hacer para no declarar en “quiebra técnica económicamente” al estado de Guerrero. Lo único que escuchamos son lamentos, y más lamentos, de que no hay dinero, de que no van a poder sacar los compromisos, pese a que ellos están ejerciendo el presupuesto que presentaron ante el Congreso del estado y fue aprobado a modo de lo que solicitaron. Para demandar más presupuesto, el gobierno estatal Astudillista está obligado a demostrar cómo se ha gastado el dinero del 2016 y como se plantea hacerlo para el año 2017. Eso de andar haciéndole a “La Llorona”, no busca otro propósito de obtener más y mejor presupuesto para el año entrante, para que el gobierno federal, los diputados y senadores de la república, los escuchen, y se apiaden de estos funcionarios que no conocen ni un ápice de transparencia y rendición de cuentas en favor del estado de Guerrero...Agresión...No sale de un problema, cuando ya entró en otro, el presidente municipal de Chilpancingo, el priista Marco Antonio Leyva Mena, quien carece de verdad de un equipo que lo auxilie, le ayude y no le complique su vida todos los días, como primera autoridad. Ahora mismos se está denunciando la agresión de sus guaruras contra una indefensa joven reportera del periódico “El Sur” que se edita en Acapulco. Desde este espacio condenamos enérgicamente que la violencia, sea la solución para evitar cuestionamientos al alcalde Leyva Mena, pues finalmente es un empleado del pueblo, cobra su salario de los impuestos, por lo tanto está obligado no solo a informar de lo que está haciendo y está dejando de hacer, si no rendir cuentas, transparentar su ejercicio gubernamental. Es condenable la agresión, sin importar el grado de afectación, pues no deja de ser una acción aberrante. De acuerdo a la versión de la reportera, en su misiva, publicada en la sección de cartas del periódico en donde labora, lo explica de la siguiente manera: “Señor director: Solicito que se publique la denuncia de una agresión a mi persona, por un escolta del alcalde priista, Marco Antonio Leyva Mena, cuando intentaba entrevistarlo sobre temas de seguimiento en la capital. Ayer por mañana, en el informe de 50 jornadas comunitarias, en el auditorio José Inocente Lugo del Ayuntamiento, que se citó a las 10:30 de la mañana y comenzó a las 11:40, me dirigí con dos reporteros más a entrevistar al alcalde después de un recorrido por una exposición fotográfica. Mientras lo abordamos, el presidente municipal estuvo siempre rodeado de sus escoltas, y no dejó de caminar en dirección al elevador privado, pese a que se le pidió que se detuviera para preguntarle sobre la protesta que en esos momentos ocurría de policías municipales, en la comandancia, para demandar el pago de un bono retroactivo y un seguro de vida. Enseguida, se le preguntó sobre el cierre de pozos del sistema de agua potable Mochitlán por vecinos de la colonia La Villita de ese municipio, debido al incumplimiento de una promesa que hizo a los pobladores de 390 toneladas de cemento a cambio del envío a la capital del agua que está en esa colonia. Al responder esta pregunta ya se encontraba fuera del elevador, y en el camino yo quedé justo frente a la puerta del ascensor. Mientras Leyva Mena respondía que ya estaba atendiendo el caso, uno de los escoltas por la espalda me tomó con fuerza de los brazos, me aventó y me hizo a un lado con violencia, para abrirle paso al alcalde. En ese momento reclamé el trato a mi persona, y pedí respeto a mi labor que es para informar a los lectores de los asuntos de interés público, y todo funcionario público tiene obligación de responder. Pero el alcalde no dijo nada, se retiró, y enseguida el director de Comunicación del Ayuntamiento, Paulo César Cerros Soriano, me pidió tranquilizarme, y que él hablaría con el hombre de seguridad. Sin embargo, cuando el reportero de Bajo Palabra, Luis Jijón León, señaló la agresión, el director de Comunicación se volvió contra él y lo acusó reiteradamente de ser tendencioso por cuestionar la labor de las autoridades municipales. Considero que la agresión contra mí y los ataques al compañero son hechos contra el trabajo periodístico, que vulneran la libertad de expresión. Exijo del gobierno municipal un trato digno y de respeto para el trabajo de los reporteros y para nuestra integridad física. Beatriz García, Reportera. Nos solidarizamos con nuestros compañeros reporteros ante estos hechos de agresión y los condenamos, venga de donde venga...Apestado...El barrio de San Francisco de Asís de Chilpancingo, está de fiesta, con motivo de las fiestas de su santo patrono, y la mañana de hoy estuvo como invitado especial en la comelitona de pozole, el gobernador priista,  Héctor Antonio Astudillo Flores y alguno que otro político gorrón, entre ellos el alcalde capitalino, Marco Antonio Leyva Mena, quien estuvo más de compromiso, que de ganas, porque se observó de que es un tipejo apestado, junto con su equipo de inútiles colaboradores, quienes prácticamente estaban apartados de los vecinos y ni los tomaron en cuenta para el desayuno mañanero, tanto que ni siquiera una silla les ofrecieron. Astudillo Flores acompañado de su esposa, Mercedes Calvo Elizundia, degustaron el rico pozole y un café de olla, con su respectiva semita, en tanto Leyva Mena, en todo momento estuvo ignorado, pese a que estuvieron en la misma mesa, pero como si no fuera la primera autoridad. Se observó que Astudillo Flores, no “fuma” a Leyva Mena, por sus desaciertos, lo saludó y le habló, más a la fuerza, que de ganas de entablar un diálogo, prefirió el mandatario hacerlo con el presidente municipal suplente de la capital del estado, Jesús Tejeda Vargas, con quien intercambió ampliamente impresiones y luego entraron al curato de la parroquia de San Francisco de Asís y después salieron para almorzar pozole con los vecinos que se incorporaron a la mesa de honor colocada expresamente en la explanada, a un lado del kiosco. Leyva Mena lucía un rostro desencajado, como regañado, pero literalmente lució apestado, junto con sus colaboradores, en la que los vecinos de San Francisco no les ofrecieron ni un café. Tan apestados son de la administración Leyvista, que su jefe y subjefe de Comunicación Social,  Paulo César Cerros Soriano y Karina Gómez, se les notó apartados de los grupos de personas, en la que los reporteros de la fuente, ni los “pelaron”, alguno que otro despistado provenientes de Acapulco los saludaban y se retiraban como si olieran azufre, en tanto el cuestionado concuño del edil el tal Fabián Yáñez, hubo algunos reporteros, que le dijeron en su cara de que era un ratero, y que cuando llegó al Ayuntamiento, traía una mano adelante y otra atrás, pero ahora disfruta de un lujoso carro y antes de seguir escuchando reproches prefirió apartarse y alejarse de las “bolitas”. No es el único ratero que tiene Leyva Mena, también  salió a relucir el nombre de su coordinador de asesores, Héctor García Avilés, y los responsabilizaron, “ellos no dejaron trabajar a Daniel Morales Pastor en la feria de San Mateo, Navidad y Año Nuevo”. “Ya vieron como son de rateros, ayer los mismos policías detuvieron, amarraron y exhibieron a Efraín Zúñiga Cortés quien en su cara lo gritaron que es un ladrón”. Algunos señalamientos y comentarios recogidos la mañana de hoy martes en la explanada de la iglesia de San Francisco al ver a la gente del gobierno municipal, y que los identifican plenamente que son allegados de Leyva Mena y que le han hecho daño al erario del municipio. Ni modo, lo que están sembrando en un año, es lo que están cosechando los Leyvistas. Para concluir, les mandamos un fraternal saludo a todos los que se llamen y apelliden Franciscos, hoy es su día, felicidades, que se las pasen a todo Panchito, entre ellos los hermanos Javier y Domingo, nuestros compañeros de páginas, pues llevan la fama en su apellido Francisco. Deseando que se la estén pasando  a todo “Frank”. 

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