martes, 13 de diciembre de 2016

COLUMNA

 El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez



 Cinco años de impunidad. -.Los policías iban directamente a matar a “algunos” estudiantes. -. Gonzalo Rivas Cámara murió por ignorancia. -.Las bombas surtidoras tienen un sistema de seguridad.
  Cinco años de impunidad, cinco años de una masacre que jamás debió suceder; cinco años de mentiras y engaños, cinco años de lucha por el esclarecimiento de los sangrientos hechos; así es, se cumplieron cinco años del artero asesinato de los estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, de
Ayotzinapa, Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, a manos de elementos de la Policía Estatal; este hecho conmocionó a Chilpancingo, pues no se había visto que, en plena celebración en honor a la Virgen de Guadalupe, los uniformados atacaran a la población, o al menos, nosotros no recordamos nada de ello; el crimen fue alevoso, directo contra los muchachos; al menos, así lo dieron a entender los medios de comunicación que, curiosamente, prácticamente quedaron en medio de la balacera, pero extrañamente, ningún comunicador resultó lesionado; con ello, podemos deducir que el ataque fue directo; así, sin cortapisas, los elementos policiacos iban directamente a matar a “algunos” estudiantes para escarmentarlos, o quizá la idea haya sido solamente lesionarlos, pero “se les pasó la mano”; de esta forma, se cumplió “un año más de exigencia, de pedir justicia para los compañeros que fueron ultimados por solo pedir una mejor Educación”; recordemos que, en esos días, los estudiantes exigían mejoras para el plantel, se incrementaran los recursos para que se tuviera una mejor alimentación de los alumnos y plazas para los egresados, entre otras cosas; sin embargo, el gobierno estatal de Ángel Aguirre Rivero -¡¡¡Gran casualidad!!! –en lugar de atender las demandas estudiantiles, les respondió con sangre y fuego; claro está, las autoridades gubernamentales negaron que los uniformados policiacos hubiesen tenido participación en los atentados, pero no contaron que la presencia de la prensa, local y nacional, desnudara su mentira, pues a través de fotografías se ha demostrado que, en los hechos, participaron de policías estatales armados y vestidos de civil a bordo de camionetas, siendo exhibidos como presuntos responsables de asesinar a los estudiantes, sin que hasta la fecha se tenga algún culpable; lo peor de todo es la muerte del empleado de la gasolinera que se ubica a la altura de El Parador del Marqués, Gonzalo Rivas Cámara, quien murió por ignorancia, porque no sabía que las bombas surtidoras tienen un sistema de seguridad que se activa al momento de existir alguna conflagración; si esto no fuera así, imagínense cuántas veces no se hubiese atentado contra estos depósitos de gasolina; pese a todo, Rivas Cámara fue galardonado con la medalla Belisario Domínguez del Senado de la República, por su presunto heroísmo, por su ignorancia y por tratar de asegurar el cierre de las válvulas del depósito de gasolina, siendo llamado “El héroe de la gasolinera”; en fin, se cumplieron cinco años y no hay nada claro en los asesinatos, tampoco lo hay en quién fue el que encendió las bombas de la gasolina que derivara con la muerte de Gonzalo Rivas, aunque en uno de los tantos vídeos “subidos” a las redes de internet, se puede apreciar a una persona que se encuentra del lado de los cuerpos policiacos, como autor de la conflagración y los uniformados nada hacen por impedirlo, vídeos que, por cierto, ya fueron “borrados” de las redes de internet; al parecer, las indagaciones siguen igual como al principio y no vemos forma de que avancen; veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: elahuizotejr@hotmail.com

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