ARTICULO

 Mentiras de EPN

 Aquí Acapulco

Isaias Alanís
A Rogelio Agustín, por su gastritis
En su mensaje a la nación del 6 de enero del año que corre, EPN, no solo vuelve a mentir, sino que su retórica nebulosa y bajo un cronograma de errores semánticos lo hunde más y lo lleva ahora si al despeñadero largamente anunciado. No es que tengan los mexicanos algo contra Enrique. No. Enrique lo tiene contra los mexicanos. En su atropellado mensaje, pasa por alto lo que durante un par de años cantó a los trece vientos sobre las bondades de la reforma. Ahora resulta que mediante un chantaje fuera de temporada, si no se incrementa la gasolina y se cobra el impuesto correspondiente, se podría ‘‘Paralizar cuatro meses todos los servicios del IMSS, desde consultas con el médico familiar hasta cirugías, guarderías o servicios de emergencia; interrumpir dos años completos los apoyos que entrega el Programa Prospera a casi 7 millones de familias; suspender tres años el Seguro Popular, el cual cuida la salud de más de 50 millones de mexicanos. (y el “PRIgresa”). Aquí les pregunto: ¿qué hubieran hecho ustedes?’’. Eso dijo el antes sonriente, guapo y hoy cara dura durante su mensaje.

Respecto al impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS, Peña vuelve a desvariar al afirmar  que, ‘‘el gobierno federal no recibirá ni un centavo más de impuestos por este incremento’’.
El aumento a la gasolina deviene de la Ley de Hidrocarburos, de la reforma energética. Peña vuelve a falsearse a sí mismo al afirmar que el incremento a la gasolina no es por la reforma energética. El llamado gasolinazo, como dijo el presidente, no va afectar a los  ‘‘60 millones de mexicanos, los de menores ingresos, sólo consumen 15 por ciento de la gasolina, mientras que 12 millones, 10 por ciento de la población de mayores ingresos, consumen 40 por ciento. En el pasado otros gobiernos decidieron mantener artificialmente bajo el precio de la gasolina para evitar costos políticos’’.
Y también afirmó que no se afectaría a las amas de casa, mentira.  El impuesto a la gasolina elevará el costo de todos los productos que consumimos 60 millones de pobres. Entonces si afecta a toda la población.
Y no es por el alza en el precio del crudo, al contrario, si el precio del crudo está a la alza, PEMEX respira y usted ciudadano presidente en su óptica lo ve al contrario. La reforma energética contenida en el Pacto por México, destaca el alza de combustibles; este pacto signado por PRI, PAN, PRD y Verde Ecologista, acordaron con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP)– incorporar más ingresos al erario mediante el alza en el costo de los hidrocarburos. La madrugada del 21 de octubre del 2016, el cartel parlamentario del PRI, PAN, PRD, PVEM, Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza y PES, avalaron la Ley de Ingresos incluyendo el gasolinazo. No está usted solo en ese barco, todos, tienen también la culpa y son también mentirosos.
Y según Usted, no habría más impuestos, la verdad es que se multiplicaron; el impuesto especial de producción y servicios (IEPS), “se aplica a la producción de servicios que causan un perjuicio social o su consumo no es deseado. Bebidas embriagantes, alcohol desnaturalizado, cervezas, y mieles incristalizables; tabacos labrados, (¿ingesta?) de gasolinas y diésel, bebidas energizantes y con azúcares añadidos; combustibles fósiles, plaguicidas y alimentos con alto contenido calórico…”.
¿Acaso el uso del diesel y gasolina para mover a México es nocivo para la nación?.
Y el recorte a salarios, las 20 mil plazas que van a desaparecer, tienen que ver con la creación de nuevos fuentes de empleo, o la contradicción entre su discurso y la realidad es diametralmente opuesto. Con la garra de Trump encima, empeñado en sellar las inversiones automotrices en México, todavía así, coloca en Relaciones Exteriores a un experto en políticas petroleras, como lo demuestra su tesis de doctorado, Luis Videgaray, sin perfil, lejos de la dinámica y experiencia de las relaciones internacionales, solo por ser amigo del yerno de Trump. ¿Será tan rural el rediseño de la política exterior mexicana como un corrido de la Banda del Recodo?
Porque durante mas de treinta años, se le ha apostado a una economía dependiente y desnacionalizadora que incendió al país durante su mandato.
Mi querido amigo Peña, en su mensaje, insististió en desligar el alza en hidrocarburos de la reforma energética y hacendaria. Y de nueva cuenta la burra al trigo con otra mentira: ‘‘el gobierno federal no recibirá ni un centavo más de impuestos por este incremento’’. No lo dijo el Chapulín Colorado, lo dijo en su mensaje de Año Nuevo el presidente de México. Y más adelante corrige y vuelve a desbarrar. “Mantener el precio artificial de las gasolinas nos hubiera obligado a recortar programas sociales, a subir impuestos o a incrementar la deuda del país, poniendo en riesgo la estabilidad de toda la economía’’. Léase bien para los que saben “ler”: “subir impuestos”, ¿que es entonces el IEPS y todos los impuestos que se vienen en cascada con el incremento al costo de la vida, gas, electricidad, transporte público, etc.?
¿Con estas acciones se pretende afianzar la economía familiar, mantener el orden republicano y lograr la unidad nacional, como lo afirmó en su discurso el presidente?
No mi amigo, el mal humor, la molestia, el coraje ya se derramó en beligerancia inducida (los cientos de bots detectados culpables de sembrar el terror) o rebelión instantánea, (Rosa Luxemburgo dixit). Hasta los propios partidos pactistas al sopesar el peligro le están dando la espalda al mandatario.
Se ha ido acumulando un rencor del tamaño de Pedro Páramo, que en palabras de Fulgor Sedano es “un rencor vivo”. Ante la beligerancia de algunos sectores; amas de casa, camioneros, gente de la calle, empresarios, estudiantes, campesinos, obreros, gente de a pie, jubilados y de los sin partido, ya tocó fondo. Le toca a Usted salir a conducir los rencores y calmar a Comala.
En sus manos está revertir el gasolinazo, es más, hasta les convendría para los comicios que se avecinan, en la sede del grupo “Atlacomulco” en el Estado de México, de lo contrario ¿estamos ante una asonada popular de grandes dimensiones? ¿Habrá una respuesta violenta del estado? Nadie lo desea.
El punto es que si las fracciones parlamentarias que signaron el Pacto por México se arrepienten y se liberan de prebendas, moches, dietas y demás dinero de nuestros impuestos, podría haber una salida, lo malo es que la gente ya no cree en ningún partido político. Ese es otro gran problema. ¿Podría Usted rectificar la ruta económica y calmar los ánimos? ¿Porque no sale al balcón de la patria, dear president Peña y habla con la verdad?
Algo se podría salvar de su mandato que a cuatro años ya hizo agua y de paso correr a tus asesores, escribidores de discursos plagado de mentiras, de garrafales errores, de cifras torcidas y  de la verdadera realidad mexicana con la bota de Trump sobre la espalda y la dependencia desde hace años de los Estados Unidos, lo de Trump no es nuevo. Reagan bautizó a México como “el patio trasero”.
Lo escribo sin entrar en detalles como corrupción, violencia, gobernadores ratas, la entrega del petróleo, gas, electricidad a empresas privadas, el golpe al bolsillo con el salario mínimo y una serie de ofensas a la nación, que no son de ahora, con usted se han acelerado. ¿Vamos a mover a México juntos? pero no en su contra Dear President.
AQUÍ ACAPULCO
La temporada vacacional ha dejado una gran derrama económica, un leve descenso en la violencia, salvo por el ataque a tianguistas de la Zapata; la gente abarrotó el puerto de Acapulco. Es un alivio saber que millones de pesos dejaron los miles y miles de turistas que decidieron pasar la temporada de Navidad y Año Nuevo en Acapulco, que entre otras cosas, ya requiere una revisión de sus servicios para no vivir y respirar solo de temporadas vacacionales, puentes y eventos especiales.
El gobernador del estado de Guerrero, Héctor Astudillo Flores en concordancia con el presidente municipal, Evodio Velázquez Aguirre, trabajaron intensamente.
Urge hacer un diagnóstico real sobre las líneas y ejes de una nueva oferta turística en el Puerto y ya no solo ofertar el turismo de playa. Guerrero, sus costas, tienen un arsenal y un potencial inexplotado, hay que descubrirlo, invertirle y con estas acciones abrir fuentes de empleo y no esperar con el “Dios en la boca” a que las temporadas vacacionales traigan turistas a Acapulco, Zihuatanejo, Costa Chica y Grande, y a Taxco de Alarcón. Guerrero, tiene espacios y zonas para dar y prestar y un gran futuro en áreas como el turismo de aventura, el cultural y ecoturístico.