viernes, 3 de febrero de 2017

PRINCIPAL DE NOTA ROJA





Acusan a la UPOEG de la masacre en Chacotla, municipio de Mochitlán, habrían actuado en complicidad con “Los Ardillos” y “Cártel de la Sierra”. (Fotos: API).




Acusan a la UPOEG de
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Bernardo Torres.--Pobladores de Chacotla, municipio de Mochitlán, región centro de Guerrero, acusaron a miembros de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), de ser los responsables del secuestro y asesinato de seis personas la noche del lunes y madrugada de este martes.
La tarde ayer jueves, cinco personas, de la misma familia, entre ellos el menor de edad, fueron sepultados en la comunidad de Chacotla, y uno más en el poblado de Mazatlán, de donde era originario.

El miedo, luego de que las amenazas por parte de grupos armados no han cesado, impidió que la comunidad saliera a darles el último adiós, y fueron sólo familiares y amigos cercanos.
Al término del cortejo fúnebre, los familiares rompieron el silencio, y responsabilizaron de esta masacre a los miembros de la UPOEG, que dirige Bruno Plácido Valerio, “El Jhonny”, originario de Palo Blanco, Isaac Navarrete Celis, a quien se le relaciona con el “Cártel de la Sierra”, así como a Celoso Ortega, líder del grupo criminal “Los Ardillos”.
Relató que el día de la irrupción, pudieron ubicar gente de esos grupos, además de que entre los gritos y comunicación de radio que sostenían los agresores.
Exigieron al Gobierno del Estado que se investigue a estos grupos, y se castigue a los responsables, pues las amenazas no han cesado, amagando con regresar a matar a quienes denuncien.
También señalaron que nunca se han metido en contra de ninguno de esos grupos, los pobladores se dedican a la siembra de Maíz, Frijol, calabaza y la crianza de animales, sin hacerle daño a nadie con eso, por lo que no entienden la razón de tan sangriento ataque.
“Si tenían algo con alguien, lo hubieran hecho, pero no meterse con inocentes, como los dos niños, ellos sólo se dedicaban a estudiar, otro trabajaba en las sabritas, otro de albañil, todos jóvenes menores de 30 años”, expuso, en las inmediaciones del panteón.
La comunidad de no más de 200 habitantes, no tiene definido su futuro, hasta hoy, cuatro días después, la comunidad sigue sin seguridad por parte de los tres niveles de gobierno, algunos abandonarán el pueblo, y pocos, pero piensan en tomar las armas para defenderse.
Reprocharon el abandono y la omisión de las autoridades, quienes desde el momento que denunciaron el ataque fueron ignorados, la Policía Estatal arribó 15 horas después, estuvo unas horas en la comunidad, y a pesar de las amenazas, no regresaron para brindar seguridad.
A pesar de que Bruno Plácido, se deslindó y ofreció coadyuvar en la investigación, uno de los familiares insistió “En realidad ellos fueron, los de Ocotito, los de Petaquillas, que no estén mintiendo, yo no sé porqué el gobierno no ha hecho nada”.
Horas después del secuestro, reveló que les pidieron un rescate de más de un millón de pesos, pero en primer lugar no contaban con esa cantidad, además de que no iban a liberarlos.
La tragedia, tuvo su fin este jueves, al filo de las 16:00 horas, entre flores y música de viento, cuatro jóvenes fueron llevados al panteón de la comunidad, y a dos kilómetros, cerro arriba, de frente al territorio de donde vinieron sus victimarios, esperarán la vida, después de la muerte. (API).

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