NOTA

Viajó 6 horas, relegada hoy
en 30 aniversario de Semujer
Bernardo Torres.--Viajó más de seis horas desde la comunidad de Mixtecapa, municipio de San Luis Acatlán, Guadalupe Gálvez Ruíz para asistir al evento que se llevó a cabo en la Residencia Oficial Casa Guerrero para conmemorar el 30 Aniversario de la creación Secretaría de la Mujer, pero en ninguna mesa hubo espacio para ella.
Para llegar al evento convocado a las 09:30 de la mañana, Guadalupe, salió el día domingo, desde su comunidad y viajó a la Ciudad de Tlapa, donde pasó la noche, y este lunes a las 03:00 de la mañana, junto con su hijo enfermo, y otro habitante de esa comunidad, también con dos niños, partieron hacia la capital del estado.
Antes de la hora citada, ingresaron a la Sala de la República, de este complejo, donde el gobernador Héctor Astudillo encabezaría el evento; sin embargo,
las cerca de mil sillas dispuestas, fueron asignadas a funcionarias de distintos municipios y dependencias estatales, pero no para esta mujer humilde.
Durante el desarrollo del acto, mientras batallaba, con su hijo de seis años enfermo, que no se puede sostener por sí sólo, Guadalupe estuvo relegada en la parte trasera de esta enorme sala, al pie de ella desfilaban funcionarios, y personal del Gobierno del Estado, acompañando a las invitadas hasta sus lugares.
Junto con el otro vecino de su localidad y sus dos niños, vieron pasar también a la decena de meseros, con los platillos que fueron repartidos—salpicón, fruta y agua de Jamaica—que algunos apenas probaron, y al final del evento fueron tirados a la basura. El desdén a esta madre de familia fue evidente, en un evento que inició con un retraso de más de media hora, donde fueron retiradas varias mesas, para que no quedaran vacías, algunas que incluso fueron ocupadas por hombres, acompañantes de las funcionarias que asistieron.
Los relegados, permanecieron sentados en un muro, ni siquiera sillas, en espera de que algún funcionario o personal del gobierno se acercara a atenderlos, pero no ocurrió, hasta después de que reporteros presentes, le preguntaron, por qué no le ofrecieron un asiento y salió a relucir, el calvario que ha venido sufriendo, y que esperaba exponer a la presidenta del DIF, Mercedes Calvo de Astudillo.
Representantes del DIF, y del área de Comunicación Social, al ver que era entrevistada por varios reporteros, de manera inmediata dieron aviso a sus superiores, y acudió la Jefa de Prensa del DIF, para conocer la situación de dicha mujer, y canalizaron su demanda, con el compromiso de que será apoyada.
Una negligencia médica, condenó a su hijo a vivir en una silla de ruedas
Guadalupe Gálvez Ruiz, es madre de Roger Patricio Gálvez, quien nació el 06 de junio del 2011, y está a punto de cumplir los seis, años, aunque pareciera que apenas tiene tres años y depende totalmente de su madre de los cuidados de su madre.
Expuso, que cuando el niño tenía 11 meses de edad, llevaba un desarrollo normal, pero se enfermó de vómito y diarrea, para lo cual fue llevado a Tlapa en busca de atención médica.
Al llegar a la ciudad, se fueron directamente al Hospital General, donde les dijeron que no lo podían atender, que no había espacio, que no había camas para internarlo y tuvieron que llevarlo a una clínica particular.
En esta clínica, dijo, le suministraron una fuerte dosis de “Gentamicina”, a pesar de que el bebé no llevaba fiebre, lo cual le provocó problemas neurológicos, “le atrofió el cerebro”, señala su madre, quien meses después supo, que se trataba de una negligencia médica.
“Al momento que llegué con el médico, le puso la gentamicina, luego que inyectaron a mi niño, empezó a llorar y a llorar, a sangrar de la nalguita, y desde entonces ya no quedó bien, miren, como no puede sostener la cabecita”, detalló.
El resumen médico, de un especialista en neuropediatría, refiere que tras varias tomografías cerebrales, se confirmó que el menor presenta atrofia corticosubcortical difusa.
En agosto de 2013, en una nueva consulta, le fue diagnosticado un Síndrome Hipotónico Central, probablemente en relación a intoxicación por neuroléptico (metoclopramida), donde le inician oxigenación cerebral y terapia de rehabilitación, tras la cual ha tenido una lenta recuperación, pero aún con diagnóstico reservado.
Durante estos cinco años, ha buscado con sus limitados medios y recursos económicos, periódicamente lo llevan al Hospital General en la Ciudad de México, y al Centro de Rehabilitación Integral Guerrero (CRIG), con sede en Tlapa, donde recibe terapias físicas.
La señora Guadalupe, es de bajos recursos, y para sostener a sus seis hijos, administra una concina económica en la Ciudad de Tlapa, y para la cual pide a las autoridades estatales apoyo, para equipar su pequeño negocio.
Sobre este caso de negligencia, la señora Guadalupe, ya ha interpuesto una demanda penal ante el Ministerio Público con sede en Tlapa, pero el proceso no avanza, y pide a las autoridades que se llegue hasta las últimas consecuencias. (API).