viernes, 11 de agosto de 2017

POLICRÓNICA

Complicidad...Pese a tener la ley de su lado, las autoridades del Consejo Estatal de Seguridad Pública en el estado de Guerrero, es cómplice de los 81 presidentes municipales, al ignorar que entre sus cuerpos policiacos carecen de lo elemental el control y confianza.

La legislación en materia de seguridad hoy en día es muy clara que para recibir  de recursos federales destinados a los cuerpos policiacos municipales, definitivamente tienen que tenerlos certificados y en Guerrero, eso no se está cumpliendo, y si se apegan a las disposiciones, la  mayoría de los 81 Ayuntamientos se quedarían su uniformados. Esto, es gracias a que el Consejo Estatal de Seguridad Pública que dirige Nybia Solís Peralta se ha convertido en una cómplice de los 81 presidentes municipales de todos los partidos políticos del estado de Guerrero, al no exigirles que sus corporaciones las tiene que someter a control y confianza, para evitar tener a guardianes improvisados. Hasta donde se sabe no hay elementos policiacos que garanticen la seguridad pública de los ciudadanos, porque lamentablemente siguen operando sin la preparación que hoy día exigen las autoridades federales, que deben pasar el examen de control y confianza. El último caso que se conoció que hasta no estaban dados de alta en el Sistema Nacional de Seguridad, los cinco policías municipales de Ahuacuotzingo que fueran asesinados cuando resguardaban una camioneta cargada de dinero del programa federal “Prospera”. El mismo presidente municipal por el Partido Acción Nacional, de Ahuacuotzingo, Gerzaín Hernández Casarrubias, hasta el día de hoy no ha sido sancionado, mucho menos amonestado públicamente  por mantener a policías irregulares. Hay complicidad de las autoridades estatales al no exigir a los 81 presidentes municipales apliquen la normatividad para tener policías certificados. En la actualidad, uno de los principales requisitos para ser policía de los tres órdenes de gobierno es estar acreditados. También hoy en día la falta de certificación y acreditación de los policías tiene consecuencias fatales, no sólo desde la óptica de que la falta de certificación implica no tener claridad en la confianza en el desempeño de los policías y en su lealtad a la población, sino que esta falta también significa ausencia de garantías para los propios policías en su situación laboral y en su protección social. Cualquier autoridad que tiene elementos policiacos sin certificar y les da la función, está cometiendo un delito, pero pareciera que no se aplica la ley. El ocupar policías, ministerios públicos o peritos sin certificar es un delito establecido en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública e incluso puede encuadrar en delitos contra la administración de justicia, previstos en la legislación federal y estatal penal. Esto último es para el gobierno del estado, pero pareciera que hay oídos sordos, pues alienta y permiten que los policías municipales realicen funciones sin estar certificados. Hasta el día de hoy, lo único que observamos que los 81 presidentes municipales está simulando, mientras la ley no se aplique, mientras sigan las componendas para mantener la estructura policial viciada, sin profesionalizar ni certificar y cooptada gran parte de ella por la delincuencia, difícilmente se mejorará la seguridad pública en nuestro Estado.  Los presidentes municipales están contratando a civiles a quienes arman sin preparación, eso ya quedó al descubierto con lo ocurrido con el caso de Ahuacuotzingo. Otros municipios también están igual o peor, como el caso del vecino Mochitlán, cuya policía no sólo se encontraría sin certificar, sino que es señalada de formar una alianza con sus homólogos de Quechultenango, y estarían ligados con un grupo delictivo en la zona. A principios de 2017, se informó el modo de operación de estas policías, que desde la entrada a Mochitlán vigilan a quienes ingresan y son rastreados por la policía de Quechultenango cuando llegan ahí. En el caso de ser visitantes del Circuito Río Azul, la seguridad de los paseantes está garantizada; sin embargo, de no ser así, los cuestionamientos de los policías son hostiles e incluso en Mochitlán, referirse a “El Jefe”, es garantía de ser trasladado por los municipales a una casa de seguridad, en donde el territorio es controlado por un personaje reconocido como parte de una estructura criminal.  Se tratado de consultar al alcalde de Mochitlán, Giovanny Jiménez Mendoza, quien luego de algunos actos públicos guardó silencio por el tema de la certificación de sus policías. “No voy a decir nada aquí, te veo más tarde en el ayuntamiento”, pronunció el edil, quien nunca llegó al palacio municipal. Esto luego de solicitarle su opinión sobre los cuestionamientos públicos de que su  policía carece de certificación, ni ha pasado el control y confianza. Tampoco el secretario de Seguridad Pública del gobierno estatal al mando de Pedro Almazán Cervantes, ha fomentado la impunidad en el tema de armar a civiles en Guerrero, que llevan a cabo labores de vigilancia, se extiende a otras instancias. En marzo, se solicitó la información sobre el número de agentes registrados ante la Secretaría de Seguridad Pública y cuántos han presentado exámenes de control y confianza en los municipios de Mochitlán y Quechultenango. Almazán Cervantes se desmarcó de ser responsable de dicha información y limitaron su respuesta a replantear la solicitud de información a instancias federales. En gobierno del estado se tiene dos instancias en la que deben obligar a los 81 presidentes municipales cumplan con la ley, el Consejo Estatal de Seguridad Pública que dirige Nybia Solís Peralta y la Secretaría de Seguridad Pública, al mando de Pedro Almazán Cervantes, ambos tiene toda la autoridad para exigir que los alcaldes certifiquen a sus policías, de lo contrario van seguir con esa deficiencia, por ende los titulares de estas instancias se convierten en cómplices.…Irresponsable…De manera irresponsable el presidente municipal de Chilpancingo, el priista Marco Antonio Leyva Mena, abandonó su cargo para estar haciendo grilla, para él los problemas pasaron a segundo término. Ahora sabemos porque no estuvo en su disque conferencia  de prensa de los martes, y los problemas de seguridad, basura, drenaje y ahora con las lluvias por el huracán Franklin, ni sus luces, pese a que el reporte del Sistema Nacional Metereológico reporta que entre los municipios que están siendo castigados por las lluvias, es precisamente la capital del estado de Guerrero. Leyva Mena, prefiere estar en actividades políticas del Partido Revolucionario Institucional en el estado de Campeche y se olvidó que es el presidente municipal de la capital del estado de Guerrero, por eso lo eligieron y le pagan su  buen sueldo y sobre todo de los problemas que enfrenta todos los días, los debe atender, como ahora sucede, que pudiera haber problemas por las fuertes precipitaciones que se mantuvo toda la noche y este jueves. La ausencia de la primera autoridad capitalina se observó desde el martes en que sin explicación alguna dejó “plantados” a los periodistas que suelen cubrir sus eventos, ni su mismo jefe de prensa, José Guadalupe Prieto Caracheo tuvo la decencia de ofrecer alguna disculpa de la suspensión. Eso se llama irresponsabilidad de este par de servidores públicos municipales, al fin y al cabo, los habitantes de Chilpancingo, aguanta eso y otras cosas más. Para que no haya duda de lo estamos escribiendo, abundaremos que el alcalde de Chilpancingo Marco Antonio Leyva Mena dejó su municipio para estar en Campeche, en una mesa temática de su partido el  Revolucionario Institucional (PRI). La capital de Guerrero de la que el presidente municipal se ausentó para participar en actividades partidistas, es la tercera ciudad del país con mayor percepción de inseguridad, según el INEGI y Chilpancingo, está considerado dentro de las 50 ciudades más violentas del país. Sin embargo Leyva Mena aparece en varias fotografías publicadas en Facebook por el diputado local priista Héctor Vicario Castrejón, para dejar constancia de su participación en la mesa temática sobre los estatutos del tricolor rumbo a su XXII Asamblea Nacional.  Para reafirmar lo que sostenemos,  el alcalde luce su camisa oficial del Ayuntamiento de Chilpancingo y su gafete del PRI posando junto al dirigente nacional Enrique Ochoa Reza, el estatal Heriberto Huicochea Vázquez, el delegado del Comité Ejecutivo Nacional, José Parcero López, el diputado Cuauhtémoc Salgado Romero y el propio Vicario. Con esto no queda ninguna duda de que Marco Antonio Leyva Mena es un irresponsable, abandona su trabajo para andar en la grilla de su partido el PRI, porque anda en busca de una candidatura a diputado local o federal, como si estuviera haciendo bien su chamba a favor de los capitalinos. Pero bueno, ese es otro tema, lo que cuestionable es que como primer autoridad tenga tiempo para sus grillas baratas, que tener como prioridad la solución de los problemas que cada día enfrenta la capital del estado de Guerrero.…Cínico…Algunos regidores del Cabildo plural del Ayuntamiento de Acapulco, oportunamente denunciaron públicamente de que estaba “perdido” el presidente municipal, Evodio Velázquez Aguirre del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que no lo habían visto. Luego vinieron otras voces del mismo cabildo de que sin explicación alguna el edil, se le desconocía su paradero. Finalmente ayer miércoles reapareció después de cinco días, y en entrevista antes de la entrega de láminas en Ciudad Renacimiento, el alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, aceptó que se fue de fin de semana a Cancún, Quintana Roo, pero que fue para gestionar ante el gobierno del estado de esa entidad acciones para promover al puerto. Es como se justifica  con cinismo el alcalde porteño, cuando se supone que los alcaldes no tienen derecho de vacacionar durante su encargo, porque son ellos los debe estar al pendiente de toda la marcha del municipio. Sin embargo con total cinismo Velázquez Aguirre, lo explica de esta manera: “Estuve fuera este fin de semana, el sábado tuve un asunto familiar, el lunes estuve activo en la Ciudad de México y el martes estuve en mi agenda en el puerto de Acapulco, y bueno, lo que yo pudiera decir es que en ese sentido estamos trabajando. Y sí estuve en Cancún, estuve visitándolo el día sábado y domingo, y me reuní con algunos  paisanos y estuve también haciendo importante solicitud al gobernador de Quintana Roo para ver si pueden fortalecer uno de los destinos más importantes, como Acapulco, Cancún, Puerto Vallarta (Jalisco) y los Cabos (Baja California Sur), sería muy importante que se incluyera a Acapulco como destino turístico”. Cuestionado sobre si trajo de Ciudad de México buenas noticias para Acapulco, aseguró que sí, pues antier tuvo la oportunidad de hablar con diferentes empresarios y estar en diferentes dependencias, viendo asuntos de la nueva ley de disciplina financiera. Interrogado sobre que el día 9 de agosto, indígenas marcharon de la glorieta de la Diana al ayuntamiento, y lo acusaron de discriminarlos, Velázquez Aguirre evadió la pregunta contestando que le preguntaran al secretario general del ayuntamiento, Daniel Meza Loeza. Con ese extremo cinismo, se maneja el alcalde Velázquez Aguirre quien definitivamente prefiere disfrutar las playas de otros destinos turísticos, que las bellezas de nuestro puerto que tiene playas inigualables, en cambio  Cancún, Quintana Roo, tiene que andar transportando arena para colocarlas en sus deterioradas playas. Falso, de que anden promoviendo el turismo en otro centro turístico, esa es una verdadera jalada de Evodio, entonces como todo un cínico, debió haber aceptado tácitamente que ya estaba chocando de los problemas de Acapulco, y que se fue a desestresar, y argumentar que como cualquier trabajador tiene derecho a vacacionar. Insistimos que eso de descansar, no cabe para una autoridad cuando ya se le está terminando el periodo por le que fue electo, en este caso son tres años y en el próximo mes se cumplirán dos años exactamente que llegó al cargo y entra al periodo final. Lamentablemente en este tipo se destina mucho tiempo a la grilla, más cuando se habla que Velázquez Aguirre está caminando hacia la vereda de la reelección y con sus cínicos paseos, son pocas las esperanzas que debe tener, porque la gente está muy molesta por que desde que llegó al cargo no ha dejado de andar viajando por el país y en el extranjero, sin que haya resultados como el incrementar la presencia de paseantes regionales e internacionales. Por el contrario los mismos hoteleros y prestadores de servicios  al calificado el periodo vacacional de verano como uno de los peores en los últimos años. Esa es la conclusión de quienes viven de la industria sin chimeneas.

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